TEJIDOS FUNDAMENTALES Y TEJIDOS CONDUCTORES
Los tejidos fundamentales son los más abundantes en las plantas y se denomina: parénquima, esclerénquima y colénquima.
PARENQUIMA
Este tejido cumple funciones de satén y de reserva. El parénquima forma parte del cuerpo leñoso de los troncos y de la médula de las raíces y de los tallos. Se distinguen tres tipos de parénquima: el clorofílico con numerosos cloroplastos responsables de la fotosíntesis.
ESCLERÉNQUIMA
El esclerénquima es un tejido que le da soporte y resistencia a la planta. Sus células tiene pared gruesas endurecidas por depósitos de celulosa y de lignina, que permanecen después de muerta la célula.
Este tejido se aprecia en forma de fibra debido a la gran longitud que alcanzan sus células, por lo cual tiene aplicación textil, como sucede en el lino. También forman la parte dura de los frutos y las semillas.
COLENQUIMA
El colénquima es otro tejido de soporte, que se encuentra en la parte de los vegetales que todavía manifiestan crecimiento como los extremos de los tallos y de las hojas. Sus células tienen vida larga y presentan paredes celulares gruesas que le dan el tejido de resistencia par que no se desgarre.
TEJIDO CONDUCTORES
El tejido conductor está formado por células tubulares alargada que se encargan del transporte de la savia vegetal. Estas células se reúnen en haces formando dos tipos de vasos conductores, los leñosos y los vasos cribosos.
· Los vasos leñosos son tubos que se disponen uno al lado del otro formando cordones por donde circula la savia bruta de la raíz hacia las hojas. El conjunto de vasos leñosos se conoce como xilema.
Xilema, tejido leñoso de los vegetales superiores que conduce agua y sales inorgánicas por toda la planta y proporciona también soporte mecánico. En las hojas, las flores y los tallos jóvenes, el xilema se presenta combinado con floema en forma de haces vasculares conductores. Las raíces tienen un cilindro central de xilema. El xilema formado a partir de los puntos de crecimiento de tallos y raíces se llama primario. Pero además, la división de las células del cambium, situado entre el xilema y el floema, puede producir nuevo xilema o xilema secundario; esta división da lugar a nuevas células de xilema hacia el interior en las raíces y hacia el exterior en casi todos los tallos. Algunas plantas tienen muy poco xilema secundario o ninguno, en contraste con las especies leñosas; el término botánico xilema significa madera.
· Los vasos cribosos o liberianos son tubos que forman cordones por donde circula la savia elaborada, formada por agua y materia orgánica que va de las hojas hacia las demás partes de la planta.
El conjunto de vasos cribosos forman el floema. El nombre de cribos se debe a que sus células tienen perforaciones o criba que establecen una conexión vertical entre las células.
Floema en las plantas superiores, tejido vascular que conduce azúcares y otros nutrientes sintetizados desde los órganos que los producen hacia aquéllos en que se consumen y almacenan. El floema está organizado en haces vasculares, que son los filamentos longitudinales del tejido conductor, asociados con el tejido conductor de agua o xilema. Los haces vasculares constituyen importantes órganos estructurales de los tallos herbáceos y los nervios de las hojas. En el cilindro vascular que atraviesa el centro de la raíz del ranúnculo, por ejemplo, el xilema forma un núcleo central estrellado en cuyas ranuras se insertan los haces de floema. De forma típica, el xilema ocupa el lado del haz vascular más próximo a la médula, aunque no son raras disposiciones distintas. En las partes más viejas de la planta, las células blandas del floema son aplastadas y empujadas hacia afuera por el floema nuevo que se va formando en el proceso de crecimiento. El floema nuevo se crea por la acción del cámbium o zona de crecimiento, una capa celular que separa el xilema del floema y produce células de este segundo tipo hacia el exterior de la planta.
El floema consta de dos tipos de células conductoras: tubos cribosos, que son los elementos más característicos, y células anexas. Los tubos cribosos son células alargadas con las paredes de los extremos perforadas por numerosos poros diminutos; a través de ellos pueden pasar las sustancias disueltas. Estos elementos están conectados en series verticales. Las células están vivas cuando llegan a la madurez, pero los núcleos se desintegran antes de iniciar la función conductora. Las células anexas, más pequeñas, conservan los núcleos durante la madurez y también están vivas; se forman junto a los tubos cribosos y se cree que controlan el proceso de conducción.
El floema puede tener fibras de líber, que son muy fuertes, y en algunas especies constituyen la materia prima de la que se obtienen fibras comerciales, como lino y yute, utilizadas en la confección de tejidos, arpillera y sacos o costales.